sábado, 28 de noviembre de 2009

Golpes

Me suele pasar, si. Esto de calcular mal. Y pensar, por ejemplo, que la cuestión esta jodida, pero no taaan jodida como verifico después. No sé si será falta de experiencia o ingenuidad. Pero por ejemplo, suelo no calcular bien el porcentaje de gente de mierda sobre la gente buena, aunque con el tiempo fui perfeccionando esa ecuación, todavía me sorprende hasta donde estoy rodeada de miserables y cuan miserables pueden llegar a ser.
Entonces me pasa que yo arranco...ruhmruhmm, voy así con mucha pila, segura de lo que hago y calculando claro que hay obstáculos. Pero no semejante paredón.
No ese estamparme la nariz contra las rocas.
Y me levanto así, con un ojo menos, con una cacho de brazo que perdí por ahí...
Y vuelvo a casa. Donde por suerte estas vos para remendarme un poco, donde están ustedes para iluminarme mucho. Y prefiero quedarme acá, autointernada en terapia hogareña, porque eso de afuera me espanta y me lastima. Aunque sea un par de días, hasta juntar fuerzas para volver a salir.

2 comentarios:

Marina Agra dijo...

Hola, Marina. Supongo yo que si tenés terapia hogareña, tenés todo lo que necesitás tener!

Marina! dijo...

Hola mari! como estas? Sisis, la terapia hogareña tiene una gran efectividad. Saludos!