La cuestión que empecé a leer, entre otros, el libro que me regalo mi Apá para mi cumplesaños, "El paraíso en la otra esquina "de Vargas Llosa. Pero, es embromado leer un libro cuando una ya le tiene idea al autor, sin embargo, la historia parecía interesante y efectivamente lo es. Voy conociendo la vida de Flora Tristan y está super atrapante hasta que...el autor hace algo que me resulta espantoso: meterse el en una tercera voz a comentar sobre los personajes. Por ejemplo:
"Regresó al albergue con aquel saborcillo ácido entre los dientes que de tanto en tanto la invadía. ¡Por qué Florita?(...)Porque la visita a esas tabernas te removió la memoria y ahora tenías en las narices las exhalaciones vinosas de los antros llenos de borrachos, jugadores y gentes de mal vivir de la Place Maubert y alrededores, entre los que pasó tu niñez y adolescencia. Y tus cuatro años de matrimonio, Florita." (...)
O sea, no solo comenta, les pregunta, les contesta, los pone en el diván, diáloga con ellos. No sé porque. Pero no me gusta ese modo de narrar. Un espanto. La historia da para otra cosa, Don Mario. O será porque le tengo idea?
4 comentarios:
Jugar a ser un Dios condescendiente y desdeñoso es un juego que les gusta jugar a muchos. Sobre todo cuando el éxito y los años te atrofiaron la autocrítica.
Saludos!
Es cierto mi vida, espero que ahora que usted va a ser tan famoso y exitoso siga conservando el talento y la capacidad de autocrítica. Te amo.
Me parece un gran blog, que pondré entre mis favoritos!
Muchas gracias!!!
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